El historiador y teólogo Carlos José Romero Mensaque ha sacado a la luz un valioso hallazgo documental: la cédula de fundación de la primitiva Cofradía del Rosario de Fregenal de la Sierra, fechada en 1576. El documento, conservado en pergamino y emitido por la Orden de Predicadores desde Roma, confirma la creación oficial de la hermandad bajo la advocación de la Virgen del Rosario en la parroquia de Santa María.

La patente, firmada por fray Sixto Fabri, vicario general de la Orden dominicana, otorga a la nueva cofradía el derecho de acoger a fieles de ambos sexos, vivos y difuntos, y les concede indulgencias y privilegios espirituales. Además, establece la celebración anual de la fiesta del Rosario el primer domingo de octubre, en recuerdo de la victoria de Lepanto (1571).
El pergamino presenta una rica decoración en orlas doradas, motivos vegetales y escenas religiosas, aunque conserva daños por el paso del tiempo. Se trata de un testimonio único que enlaza la tradición rosariana con la actual Hermandad de la Soledad, heredera de aquella primitiva corporación.
Este descubrimiento no solo aporta nueva luz a la historia religiosa de la villa, sino que también confirma la temprana implantación de la devoción al Rosario en Extremadura, ligada a la expansión dominicana tras Lepanto.