EL ORFEBRE MANUEL ROMÁN SECO Y LA CORONA DE LA VIRGEN DE LOS ÁNGELES DE LA HERMANDAD DE LOS NEGRITOS
Manuel Román Seco, nacido en 1902 y fallecido en 1981, fue uno de los orfebres sevillanos más destacados del siglo XX. Protagonizó, junto a otros artistas del mismo gremio, el renacimiento experimentado por la orfebrería sevillana en el siglo pasado. Esta edad de oro de la orfebrería estuvo vinculada a la demanda de obras por parte de las hermandades de Sevilla, empeñadas en la mejora de su patrimonio artístico a partir de la celebración de la Exposición Iberoamericana de 1929. Manuel Román Seco tenía taller propio en la calle Lope de Vega, en los popularmente conocidos como Pisos de Pinillos. Aunque las obras salidas del taller iban firmadas por Manuel, este orfebre trabajaba de forma conjunta con su hermano Francisco Román Seco. Entre su producción son piezas destacadas la corona procesional de la Virgen de la Candelaria, la corona procesional de la Virgen de la Caridad, la diadema de la Virgen de la Piedad, la Corona de la Virgen del Mayor Dolor, etc. Manuel Román Seco también trabajó en obras de carácter profano, como la monumental lámpara del Panteón de Marinos Ilustres de San Fernando (Cádiz).